Somos un movimiento sin fines de lucro, de carácter apostólico, que trabaja constantemente al servicio de las familias que habitan en nuestro país. Funcionamos administrativamente autónomos, aunque permanecemos vinculados a la Pastoral Familiar Nacional, organizados en consonancia con la institución FIRES internacional, y supeditados doctrinariamente a los postulados de nuestra iglesia católica.

Los principios que orientan todas las actividades de nuestros programas están relacionados con:

  • El comportamiento adulto
  • El dinamismo juvenil
  • La eficacia organizativa
  • El liderazgo cristiano
  • y la fidelidad a nuestra doctrina en favor de las familias católicas.

Nuestro estilo de vida se concentra en las actividades de la persona como integrante de familia y de grupo apostólico, donde Dios constituye el motor que hace funcionar en la cotidianidad, los valores trascendentales que nos identifican y cohesionan de manera permanente.

Creemos en el poder de la plegaria, en la congruencia entre nuestros sentimientos, pensamientos, palabra y acción; y en la utilidad social de nuestro compromiso.

Aprendemos con Cristo que nos conocerán por nuestros frutos, por lo cual hacemos oración y obras de misericordia, como parte de nuestra responsabilidad, que comienza con tratar de ser cada día mejores padres, hijos, hermanos, vecinos y ciudadanos. Y en consecuencia, nos presentamos ante Dios como testimonios vivos de todo lo que predicamos.

Funcionamos actualmente a través de nueve programas establecidos en mas de 60 ciudades de Venezuela:

Estamos dispuestos a desarrollar nuevos programas de acuerdo con las directrices de nuestro fundador, el padre Gabriel Calvo y las necesidades que vayan surgiendo en las familias que atendemos.

No somos la familia de Nazaret, pero intentamos permanecer en el camino hacia Belén, de modo que nuestra visión está orientada hacia el logro de la santidad con y dentro de nuestras familias, concebidas como iglesia doméstica.

¡Somos el producto del amor de Dios y queremos ser dignos de él!